Todo cambio de época trae consigo un “tsunami” que interpela, que siembra incertidumbres, que desestabiliza… Un mundo nuevo está surgiendo ante nuestros ojos. Esta realidad ocurre cíclicamente en la historia humana. También Francisco de Asís experimentó un tiempo de cambios y tuvo que aprender a re-situarse, a descubrir su camino y su misión. En este proceso de búsqueda fue conquistado por Cristo.
El “Pobre de Asís” nos interroga, lo mismo que nos interroga la grandeza de sus hechos y gestos que comprometen la complejidad de nuestra humanidad. Francisco es el místico que descubre y experimenta el misterio de Dios y de su obra; el que a partir de la Palabra de Dios escruta la profundidad de lo real. Por eso, es posible encontrar en Francisco una ayuda despertar y calentar este “mundo enfriado” en el que vivimos. Su deseo es el de proponer la vida según el Evangelio a nosotros que, saturados de “grandezas” y de artificios, necesitamos de un “ingenuo” que nos despierte. Francisco se viste de servidor para conducirnos a Cristo.
El Poverello, junto con nuestro papa Francisco, grita en el desierto de nuestro mundo actual: ¡No nos dejemos robar el entusiasmo misionero!” “¡No nos dejemos robar el gozo de la evangelización!” “¡No nos dejemos robar la esperanza!” “¡No nos dejemos robar la comunidad!” “¡No nos dejemos robar el Evangelio!” “¡No nos dejemos robar el ideal del amor fraterno” (Evangelii Gaudium)
Todo esto y mucho más podéis descubrir y saborear en esta gran obra de Suzanne Giuseppi Testut, ganadora en Francia del «Premio Espiritualidades de Hoy, 2015», y que ahora os ofrecemos en nuestra colección Hermano Francisco.
Un libro para leerlo y releerlo lentamente, saboreándolo y buscando la iluminación para el propio itinerario espiritual.

Puedes pedirlo o tener más en información sobre el mismo en www.edicionesfranciscanasarantzazu.com