El Papa Francisco en la edición 2020 del ESPÍRITU DE ASIS  decía el pasado día 20 de octubre en Roma a los diferentes líderes religiosos del mundo;

“Jesús en la cruz no señala con el dedo a nadie, sino que abraza a todos. Porque sólo el amor apaga el odio, vence a la injusticia, deja lugar al otro y facilita la plena comunión entre nosotros” 

“El mandamiento de la paz está inscrito en el profundo de las creencias religiosas. Partiendo de la fe uno puede convertirse en artesano de la paz. Las religiones están al servicio de la paz y la fraternidad y por eso este encuentro impulsa a rezar con insistencia por la paz, a no resignarse nunca a la guerra”.